Podcast: Consejos para ser feliz

Como te estimo tanto, hoy te he preparado un tema muy especial. Te deseo lo mejor en la vida, que tus metas se cumplan y que vivas cada día con plenitud e ilusión.

Por eso, te he creado una lista de recomendaciones para ser feliz.

Recuerda que la felicidad no depende de lo que ocurra a tu alrededor. La felicidad es un estado interno, una decisión que tomamos en cada momento y una forma de ver el mundo que nos rodea.

Primero de todo, procura no hablar ni pensar mal de los demás. Ni de ti mismo. Los pensamientos y emociones que creas en tu interior modifican tu estado de ánimo. Entonces, guarda en tu interior todo lo positivo y evita crear negatividad de ningún tipo.

Recuerda que no debes hacer ni dejar de hacer nada que quieras. Tú eliges que tipo de vida quieres tener. Decide tu propio camino y no permitas que te afecten las opiniones de los demás ya que cada cual tiene una opinión distinta y nadie tiene la verdad absoluta.

Si tratas de complacer a todo el mundo, con dificultad podrás complacerte a ti. Del mismo modo, desea siempre el bien para los demás. No importa si eres de religión cristiana, pero en la biblia hay una frase muy sabia que dice: “Traten a los demás como ustedes quieran ser tratados”. Podemos extraer un sentido mucho más profundo a este mandato. Y es que, éste no solamente nos invita a que hagamos buenas acciones a los demás. También esto aplica a los pensamientos y a los deseos. Yo lo aplicaría del siguiente modo: “Desea que a los demás les ocurra lo mismo que quieras que te ocurra a ti”. Cuando deseamos el mal a nuestro prójimo, estamos creando emociones de resentimiento, odio, envidia en nuestros corazones y aunque nosotros creamos que estos sentimientos los estamos enviando hacia alguien o algo en el exterior, la realidad es que se quedan dentro de nosotros y afectan negativamente a nuestro estado de ánimo.

En la vida todo lo que das te vuelve multiplicado. Por lo tanto, mi recomendación es que des sin pedir nada a cambio, pero que no solo des objetos materiales, también manda buenos deseos y amor a tu prójimo, porque cuanto más das, más recibes.

Mi siguiente consejo es que te quejes menos y agradezcas más. Cada vez que te quejas, le mandas un mensaje a tu subconsciente de negatividad, de infelicidad, de carencia. Sin embargo, cada vez que gradeces, estás sumando positividad a tu actitud emocional, lo que contribuye a sentirte mejor, más vital y con más energía. Hay tantas pequeñas cosas a lo largo del día por las que te puedes quejar como por las que puedes agradecer. Tú eliges, en cada momento, aquello en lo que enfocas tu atención. ¿Te quejas de que hoy no puedes desayunar tu plato favorito o agradeces que hoy tienes un plato de comida sobre la mesa? ¿Te quejas de que tu trabajo es aburrido o de la actitud de tu jefe? ¿O agradeces que tienes un sueldo con el que puedes cubrir tus necesidades y una ocupación cada día?

Como ves, la única diferencia entre la gente que es feliz y la gente que no lo es son, al fin y al cabo, pequeños detalles en la forma en que cada cual entiende su propia vida y aquello en lo que cada cual elige enfocar su atención.

El dinero tampoco da la felicidad. Puedes ver personas con sueldos muy altos felices e infelices. Puedes encontrar personas con sueldos bajos felices como aquellos que también son infelices. Tener abundancia económica, por supuesto, favorece a que cada cual pueda cubrir sus necesidades de una mejor manera, pero, en última instancia, no define la felicidad de cada cual. Por eso no debes basar tu felicidad en tus condiciones externas si no en las internas, como ya hemos hablado antes.

Espero que estos consejos te hayan ayudado para reflexionar un poco, así como para mejorar tu comprensión del idioma español. Aplícalos en tu vida diaria y cuéntame si te han ayudado. ¡Me encantaría conocer tu opinión! De corazón, deseo que hoy decidas ser un poco más feliz porque la vida es un regalo y una oportunidad para hacer y vivir cosas maravillosas. ¡Aprovéchala!

¡Hasta pronto! Nos vemos en el próximo podcast de iAmigo School.